3 abr 2010

Una parada en el camino, vida de insecto.

Fin de una etapa, una parada en el camino.
El teatro conlleva intensidad en la vida, todo se hace extremo: la enfermedad, la necesidad de estar saludable, bien alimentada, el descanso, las dificultades de nuestro cotidiano, la concentración, el animo creador, la motivación, la emoción, los movimientos internos. Llevo 6 meses viviendo cada día solo para la escena. Me he sentido soldado, monja, guerrillera, yogui, bodisatva, cualquier oficio y vocación que conlleva un alto nivel de disciplina, de entrega, de preparación del cuerpo y del alma.., artista en definitiva.
Todo llega a su fin y es saludable. Acabar, despedirse, vaciar el cuerpo , el corazón, el espíritu..., vaciarse...De pronto el silencio, parar, observar el mundo, la naturaleza, sentir la relatividad de la condición humana, sentir la pequeñez de lo que somos y de lo que proyectamos en el trabajo, en las relaciones, en el arte.
Dentro de mí la tentación de no despegarme, de resistirme a soltar el personaje, el escenario... quédate conmigo un poco más, ha sido tan difícil y tan bello....pero ya pasó, es pasado, ahora sólo queda este ahora imprevisible, vacío, misterioso; ahora es ahora, el no saber, el vértigo de lo nuevo, de lo que esta por venir, el anhelo de una nueva experiencia creativa.... Pero no, Consuelo no construyas, no proyectes, no rellenes el hueco; sólo mira este instante, respiralo, vacíate en este instante. Tus células necesitan renovarse, dormir, descansar, comer, no hacer nada, contemplar el mundo sin ser protagonista, sin estar bajo los focos y en el centro de la escena, contemplar las flores diminutas y las hormigas, pasear con tu perras... Un poquito de vida de insecto, de flor silvestre, de tierra, de cocina y lavadora.
Disfruta es un momento inmenso, necesario... después vendrán otros momentos en los que podrás construir sobre este vació, sobre esta quietud.., el descanso del guerrero, el retiro del monje, el desparrame necesario.
Vuelta casa, el regreso, volver a la santa simplicidad , a la esencia.
Buena vida, buen descanso a todos y todas.